El calor húmedo destruye los microorganismos por coagulación de
sus proteínas celulares. El principal método de esterilización que emplea calor
húmedo es la esterilización por vapor a
presión. Existen otros métodos de descontaminación que emplean este tipo de
calor los cuales, aunque no permiten la destrucción total de los
microorganismos, disminuyen la carga microbiana que posee un material.
Entre estos
métodos podemos citar:
• Tindalización
(esterilización fraccionada)
• Agua
hirviendo
• Pasteurización
• Olla de presión
Ebullición:
Es un método simple, pero no es el ideal ya que
no produce esterilidad pues no reduce las formas de resistencia o esporos, ni a
los virus; por lo tanto su empleo se limita a casos de emergencia. En realidad
mediante este método solamente disminuye la contaminación.
Pueden "esterilizarse" por ebullición
material de vidrio jeringas, tubos, etc.)
Excepcionalmente instrumental metálico, teniendo
en cuenta que este puede experimentar procesos de oxidación y el consiguiente
deterioro de los elementos cortantes (tijeras, bisturí).
La corrosión del material
oxidante puede disminuir con el agregado de sustancias alcalinizadas (carbonato
de sodio, cloruro de potasio, nitrato de potasio o de sodio, carbonato de
potasio, etc.) en el agua; además tienen la propiedad de elevar el punto de
ebullición siendo por este motivo, más efectiva la eliminación de las formas de
resistencia. El tiempo mínimo de ebullición debe ser de 15 minutos,
destruyéndose las formas vegetativas entre 3 y 5 minutos.
Vapor de agua saturada y a
presión:
Este procedimiento se
realiza mediante el empleo del autoclave, pudiendo utilizarse también el método
de la olla de presión.
Partes del
autoclave:
1. Dos cilindros metálicos, uno mayor (camisa
externa), que contiene en su interior a otro (camisa interna), en la base posee
una lámina cribada que permite observar el nivel del agua (y colocarla) y el
pasaje de vapor.
2. Tapa de bronce que se adapta perfectamente al
aparato y se cierra herméticamente mediante mariposas con arandelas.
3. Válvulas de seguridad con pesas.
4. Manómetro que mide la presión del sistema,
con lo que también se mide la temperatura
5. Espita de descarga o robinete.
6. Fuente de calor.
Manejo del
autoclave:
a) Colocar agua hasta unos centímetros (2 ó 3)
por debajo de la lámina cribada.
b) Acondicionar el material a esterilizar en el
interior del autoclave; puede colocarse en tambores o paquetes; es aconsejable
dejar un espacio suficiente (unos pocos centímetros) entre los paquetes, y
entre estos y las paredes del autoclave para permitir la circulación del vapor.
Recordar que los tambores deben colocarse con las cribas abiertas.
c) Cerrar la tapa e ir ajustando las mariposas
de a pares opuestos.
d) Abrir la espita.
e) Encender la fuente calórica.
f) Comenzará a salir por la espita vapor
discontinuo (chorros de vapor y aire intercalados); esto significa que el
autoclave se está purgando (está saliendo el aire que hay en su interior).
Cuando la salida de vapor se hace continua se procede al cierre del robinete
(el autoclave ya se ha purgado).
g) Observar la presión (manómetro) hasta que
alcance el nivel deseado.
h) Regular la fuente calórica una vez alcanzado
dicho nivel para mantener la presión y la temperatura constantes y evitar que
siga ascendiendo. A partir de ese momento se comienza e contar el tiempo.
i) Una vez transcurrido el tiempo necesario para
la esterilización se apaga la fuente calórica.
j) Descomprimir rápidamente mediante la apertura
total de la espita para favorecer fa eliminación de vapor y e1 secado del
material esterilizado. Cuando se colocan a esterilizar líquidos (cultivos en
microbiología, por ejemplo), la descompresión debe ser lenta para evitar su
ebullición.
k) Destapar el autoclave y dejar enfriar.
Temperaturas de esterilización:
121°C...........1 atmósfera
134°C...........2 atmósferas
El tiempo de esterilización varía de acuerdo al
material a esterilizar y a la temperatura utilizada. Ej.: para el instrumental
metálico es de 20 minutos cuando se utilizan 121°C - 1 atmósfera y de 15
minutos a 134°C - 2 atmósferas.
Para la lencería quirúrgica
el tiempo aumenta un 50%.
BIBLIOGRAFIA
Clavell, L.; Pedrique de Aulacio, M. 1992.
Microbiología. Manual de Métodos Generales (2da edición). Facultad de Farmacia.
Universidad Central de Venezuela.